Algunos clubes tienen evidentes relaciones y facilidad para firmar jugadores suyos, convertidas estas compañías en auténticos salvavidas para entidades que necesitan comprar y vender cada verano para cuadrar cuentas. Creo que en el fútbol australiano las llevan así. Lo de las camisetas sin mangas, quedan muy horteras de chulo de barrio. El segundo jugador que más camisetas vende es Luka Modric (37 años). El mismo club que volvió loco a Marco Asensio, no respetó al Real Madrid y no contestó a una oferta de 200 millones de euros que hizo el club blanco por el francés.