Pese a todo, sigue siendo un depredador del área, como demuestran sus más que aceptables cifras goleadoras (24 goles en 39 partidos). Jugador clave en el Liverpool 3.0 de Jürgen Klopp, con el que ha rozado los 40 partidos disputados. En un equipo eminentemente físico, Thiago pone el toque y la finura, reivindicando un estilo de juego que fue seriamente puesto en entredicho durante su etapa en el Bayern.